Hablando con Raquel me dijo algo que ella cree que les define como pareja, era algo así “somos muy diferentes en cuanto aficiones, pero tenemos mucho que ver” y es verdad quizá cada uno tiene sus aficiones y hobbys, pero en el fondo son iguales, una de esas parejas que se hace querer. Arturo es uno de esas personas que te acoge, que intentar integrarte y lo hace de manera natural sin ser forzado, Raquel es el núcleo de su familia, cuando necesitan algo siempre acuden a ella porque siempre está para todos. Todo el mundo estaba deseando que se casaran para celebrarlo con ellos y demostrarle cuanto les quieren. Del grupo de amigos del pueblo, son de los últimos en casarse y esto se notó en la fiesta que nadie quería que se acabase. Un gran día.